Sabino Cuadra Lasarte. Diputado de AMAIUR Hay quienes afirman que la Transición fue modélica y sus protagonistas políticos de altura, “de los que ya no hay”. Según esto, el rey, Suárez, González, Carrillo…, fueron los artífices de un proceso de ingeniería política que logró el tránsito de la más siniestra dictadura a la más envidiable democracia. Al igual que Jesús en las bodas de Canaan, lograron el milagro de convertir el agua de cloaca franquista en democrático vino de crianza. Algunos pensamos, sin embargo, que el nuevo régimen mantuvo el ADN franquista. Un rey a quien daba lo mismo jurar fidelidad a Franco y su régimen, que a la democracia y los derechos humanos; una Iglesia que mantuvo sus privilegios educativos, fiscales y sociales; un Ejército, Policía y Guardia Civil, principales pilares represivos de la Dictadura que, sin depuración alguna, fueron vendidos como modelo de profesionalidad y espíritu democrático; una Banca y una clase empresarial que medró al a...