A 35 años del colocón democrático inicial tras la Dictadura que abrió esperanzas a la ciudadanía, la desafección ha ido minando, paso a paso, el impulso inicial de los protagonistas de entonces, y se ha instalado mayoritariamente en las jóvenes generaciones. Manifestación en Madrid La respuesta oficial a esta desafección es ¡Firmes con la Constitución ! Grito éste, heredero de aquel otro ¡España Grande, España libre, España Una ! que resonaba todas las mañanas en las patios de las escuelas de la letra con sangre entra. Y así como estos gritos han quedado obsoletos con la grandeza minada, la libertad quebrada por la desigualdad y la unidad amenazada, lo de la Firmeza ante la vieja Constitución actual se está convirtiendo en debilidad de papel de fumar. Cuando una Constitución no respeta sus grandes principios inspiradores, ni siquiera sus instrumentos gestores, y los Gobiernos miran para otro lado, la carcoma de la desafección social será la única que co...