Dolores Cospedal en el Palacio de Fuensalida Aterrizó en Castilla La Mancha con carita de niña buena de derechas y dando lecciones de integridad a todo el mundo aunque pronto descubrimos que con ella venía a cuento aquello de “la ambición rubia”. Fracaso absoluto en su primer intento por llegar al gobierno regional pero dejando pistas de los lodazales que estaba dispuesta a pisar con tal de llegar al poder: incluida la presunta financiación ilegal del partido para comprar editoriales y artículos de opinión favorables entre la tripera prensa local. La estrategia de tierra quemada vino después, cuando su compañero de almohada le inspiró la falta de escrúpulos de la que él siempre hizo gala en su corta pero intensa carrera política y en su lucrativa y larga carrera empresarial. Como empresario ha sido el perejil de todas las salsas y ha jugado en las partidas más comprometidas. Esas en las que un juez independiente o un tribunal sin afiliados del PP dictaría siempre sentencia cond...